La pasión de Enrique de Toulouse-Lautrec para los bailarines y para el mundo que representa es conocida. Su extraordinaria pasión por el mundo del teatro lo llevó a pintar obras maestras inmortales, pero también hay cuadros menos conocidos que logran capturar imágenes y contextos sublimes. Una de ellas, en mi opinión, es la pintura al óleo en el «cartón Jane Avril bailando «. Una pintura llena de encanto, la elegancia y la melancolía de un mundo que con el tiempo desaparecido.
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©Andrés Cifuentes
¡Gracias por leerme!
ECO SOCIAL...OJO CRÍTICO 
Es verdad, parece como si la bailarina se arrancara a bailar en cualquier momento..
Como yo escuchando la guitarra de fondo, gracias.
Un abrazo.
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Así es. La apodaban La Mélinite, (como la melinita), una sustancia explosiva.
La bailarina Jane Avril (1868-1943) fue una de las estrellas del cabaret parisino Moulin Rouge en la última década del siglo XIX. Era seductora y exótica, irresistible para un pintor amigo de la noche como Henri de Toulouse-Lautrec, que la retrató con detallada admiración.
Un abrazo.
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